Príncipe, te estoy siguiendo
Transcribo un escrito de la señora madre del primer caído en la recuperación de las islas, en alusión a esta conmemoración:
20 NOVIEMBRE 1845-2011
“DÍA DE LA SOBERANÍA NACIONAL”
Un aniversario más de aquella gloriosa jornada de la “BATALLA DE LA VUELTA DE OBLIGADO” el 20 de Noviembre de 1845 cuando el coraje, el ingenio, el valor unidos al sagrado Amor a la Patria, de los criollos se impuso al atropello de la poderosa flota anglo-sajona.
Así con sangre y sacrificio se inmolaron aquellos hombres cuyo sueño era sólo la integridad de su tierra.
SU SOBERANÍA. Esa Soberanía que no se declama sino que se ejerce. Esa Soberanía enterrada en las entrañas de la Historia. La que forjaron los grandes y nos dejaron como herencia de un pasado de LIBERTAD. La que nos permite respirar el mismo aire a todos los argentinos cubiertos por el mismo cielo celeste y blanco.
Hoy a 166 años de aquella epopeya la PATRIA ha perdido su SOBERANÍA. Ya no es la altiva guerrera de Obligado, sino la ultrajada esclava de intereses espurios y condicionantes. Se elevan tímidas voces de protesta ante el desafío agraviante de los poderosos del mundo, ladrones no solo de la SOBERANÍA territorial, sino de la “soberanía moral”, último baluarte en la defensa de una Nación que supo ser “SOBERANA”.
Esa misma Nación que en 1982 recuperó con fiereza y valor su SOBERANÍA ultrajada durante 150 años por los mismos enemigos, por la misma prepotencia, por la misma avaricia…
Así, durante 74 días a costa de muerte, dolor y coraje, la Argentina recuperó para siempre, aquella SOBERANÍA por la cual lucharon los HÉROES DE LA VUELTA DE OBLIGADO.
Pero no alcanzaron para restituirle su “soberanía moral” ensombrecida por una democracia mal interpretada, unas instituciones vulnerables al poder, una ciudadanía confundida por los medios mercenarios y un desprecio culpable hacia quienes siguiendo su bandera, lo dieron todo.
A treinta años de la Gesta en medio de tratados y documentos, la verdadera SOBERANÍA argentina, la ejercen la Cruces de Darwin, el manto de la Virgen de Lujan, las heridas de los VGM, el espíritu de los que no quisieron sufrir el olvido, las mujeres que en silencio y ejemplo respiran el aire glorioso de la Victoria personal de sus hombres…
Pero la “soberanía moral” sigue atropellada por Tratados inicuos, por escritores pedantes, por comunicadores oportunistas, por revanchismos, por sembradores de odio y venganza encaramados en puestos claves, por comodidad, por ambición, por desidia, por “plata”…
Sin moral ningún pueblo alcanza su plena SOBERANÍA. Si se pretende servir a la verdad exhibiendo inhumanamente las heridas purulentas de una guerra. Si se rebaja a sus hombres con expresiones discriminatorias. Si con autosuficiencia se desnudan secretos en demostración de una ignorancia culpable ante un enemigo sagaz y artero acostumbrado a la prudencia y a la acción, jamás se conseguirá la catadura moral que lo haga SOBERANO ante el mundo. Vendrá un príncipe a visitar sus posesiones, se seguirá explotando el petróleo y la pesca, se extenderán las 350 millas, el país ribereño engrosará la lista de territorios de ultramar y a diferencia de las cadenas que detuvieron la osadía, aquel 20 DE Noviembre de 1845, la ARGENTINA a los 30 años de su VICTORIA, escondida en Malvinas seguirá ejerciendo su SOBERANÍA en el cielo, el mar y la turba atados en una cadena infranqueable de Rosarios que ningún poderoso podrá traspasar.
Por sagrada coincidencia en este “DÍA DE LA SOBERANÍA NACIONAL” CRISTO REY, nos mostrará su grandeza como único SOBERANO de todas las Naciones y ante EL elevemos nuestras súplicas en nombre de todos aquellos que como EL en JERUSALÉN, lloramos sobre la PATRIA desolada.
¡¡¡Malvinas, VOLVEREMOS!!!
María Delicia Rearte de Giachino