En la tercera semana de Abril de 1982, se estaba completando el despliegue de tres brigadas del EA en el extremo sur patagónico (la III de Infanteria, la I de Caballería Blindada, a la que pronto de sumarían elementos de otra, la VII de Infantería), al tiempo que una cuarta (la IV Aerotransportada) alineaba una parte importantísima de sus efectivos, en la forma de dos Fuerzas de Tarea ("Rayo" y "Trueno") en la zona de Comodoro Rivadavia. A grandes rasgos, el despliegue de mas de la mitad de los efectivos de la Brigada de Infantería IX (Chubut), de la X Brigada de Infantería y de agregados de la IMARA y Grupos de Artillería de Corrientes y Córdoba (GA3 y GAAerot 4, respectivamente) al espacio insular, suponía dejar reducido en al menos un tercio el efectivo acantonado en la Patagonia Austral en "tiempos normales".
La posibilidad de que las hostilidades que ahora resultaban cada vez mas claras con Inglaterra, devinieran en un conflicto "a dos frentes" con Chile, se volvía llamativamente posible de acuerdo pasaban las horas. De tal suerte, el despliegue del EA supuso -a grosso modo- destinar a dos terceras partes de sus brigadas de combate a roles de "custodia activa de fronteras" o a acciones bélicas directas, en un frente que se extenía por miles de kilómetros de cordillera, pampa austral, costas atlánticas y el escenario de la baja montaña y turba insular. La FAA había emprendido similar camino al crear la Fuerza Aérea Sur, a poco de producida la Operación Rosario, y la ARA estaba remontando dos Batallones extra de Infantería de Marina (N° 6 y N°7), para desplegar junto con los restantes cuatro a la Isla Grande de Tierra del Fuego, en lo posible durante el mes de Mayo. Desde Neuquén hasta Güer Aike, desde San Antonio Oeste hasta Goose Green, Fox Bay o Grytviken o la Peninsula de Pembroke, las unidades de las tres FFAA se hallaban a la vuelta de posibles (y cada vez mas probables) acciones bélicas reales.
Sobre el 22 de Abril, tras una visita relámpago a las Islas, el Tte General Galtieri toma la decisión de desplegar a Malvinas una tercera Brigada de Infantería al completo, para sumar efectivos a la defensa. Mas allá del evidente problema logístico que ese despliegue supondría, el desafio analítico parecía girar en torno a la selección de la unidad a desplegar. Prontamente -y sin mucha planificación de detalle- se decidió que fuera la III Brigada de Infantería de Corrientes, cuyo Grupo de Artillería orgánico estaba ya en las islas desde hacia mas de una semana. Asi, en lo que podría considerarse una proeza del transporte aéreo argentino, en poco menos de una semana, sin ningún aviso previo y con una planificación supeditada a las variables condiciones climáticas, se logró trasladar a las islas a la casi totalidad del efectivo de la Brigada al mando del Gral Parada, asi como la dotación de munición y algunos viveres y raciones. El 29 de Abril, todavía llegaban los últimos rezagados junto con las pocas vituallas de que pudieron echar mano; los elementos de apoyo de fuego de cada unidad quedaban a la espera de la reanudación del puente aéreo.
Con el desarrollo de la Operación Paraquat, los ingleses demostraron que no venían al Atlántico Sur a pasear o "a mostrar la bandera". El 26 de Abril esta perspectiva, terminó de convencer a algunos mandos de la necesidad de hacer planes para la eventualidad de que la posibilidad antes mencionada (de que las hostilidades se abrieran y luego devinieran en conflicto a dos frentes) finalmente se concretara.
El 28 de Abril el Comandante del V Cuerpo de Ejército publicó y distribuyó su "Instrucción Preparatoria" para que se condujera el planeamiento preliminar de acciones en caso "de conflicto simultáneo con Gran Bretaña y Chile". El mismo contemplaba 4 posibles acciones contra Chile, en el área del Sur santacruceño, especificamente, tres de las cuales se planificaron como contra-ataques ante eventuales acciones chilenas, sobre las que se construía una acción de mayor envergadura hacia el interior del territorio chileno. La cuarta, sin embargo, imponía la realizacion de una ofensiva (que hoy denominaríamos "preventiva") con destino a la zona de Segunda Angostura, denominado OBJETIVO TERO.
Con un plazo de ejecución del orden de los 5 días, el objetivo era conquistar la pequeña localidad y retenerla; accesoriamente, se establecía la necesidad de acechar y hostigar a las fuerzas enemigas, a partir de una acción que -a caballo de la ruta hacia Punta Arenas- parecía tener por objeto romper la ligazón terrestre entre las poblaciones mas grandes de la Región de Magallanes (Punta Arenas y Puerto Natales), a lo que se asignaba el nombre de OBJETIVO ROJO.
Las dos primeras imágenes correspoden a la mencionada "Instrucción Preparatoria...". Las tres últimas (incluido el mapa que se ve en quinto lugar), corresponden al "Plan de Ofensiva EO Nro 4" o Plan de Ofensiva Estratégico Operacional, en su cuarta variante. Acá los documentos:
Saludos
Christian
La posibilidad de que las hostilidades que ahora resultaban cada vez mas claras con Inglaterra, devinieran en un conflicto "a dos frentes" con Chile, se volvía llamativamente posible de acuerdo pasaban las horas. De tal suerte, el despliegue del EA supuso -a grosso modo- destinar a dos terceras partes de sus brigadas de combate a roles de "custodia activa de fronteras" o a acciones bélicas directas, en un frente que se extenía por miles de kilómetros de cordillera, pampa austral, costas atlánticas y el escenario de la baja montaña y turba insular. La FAA había emprendido similar camino al crear la Fuerza Aérea Sur, a poco de producida la Operación Rosario, y la ARA estaba remontando dos Batallones extra de Infantería de Marina (N° 6 y N°7), para desplegar junto con los restantes cuatro a la Isla Grande de Tierra del Fuego, en lo posible durante el mes de Mayo. Desde Neuquén hasta Güer Aike, desde San Antonio Oeste hasta Goose Green, Fox Bay o Grytviken o la Peninsula de Pembroke, las unidades de las tres FFAA se hallaban a la vuelta de posibles (y cada vez mas probables) acciones bélicas reales.
Sobre el 22 de Abril, tras una visita relámpago a las Islas, el Tte General Galtieri toma la decisión de desplegar a Malvinas una tercera Brigada de Infantería al completo, para sumar efectivos a la defensa. Mas allá del evidente problema logístico que ese despliegue supondría, el desafio analítico parecía girar en torno a la selección de la unidad a desplegar. Prontamente -y sin mucha planificación de detalle- se decidió que fuera la III Brigada de Infantería de Corrientes, cuyo Grupo de Artillería orgánico estaba ya en las islas desde hacia mas de una semana. Asi, en lo que podría considerarse una proeza del transporte aéreo argentino, en poco menos de una semana, sin ningún aviso previo y con una planificación supeditada a las variables condiciones climáticas, se logró trasladar a las islas a la casi totalidad del efectivo de la Brigada al mando del Gral Parada, asi como la dotación de munición y algunos viveres y raciones. El 29 de Abril, todavía llegaban los últimos rezagados junto con las pocas vituallas de que pudieron echar mano; los elementos de apoyo de fuego de cada unidad quedaban a la espera de la reanudación del puente aéreo.
Con el desarrollo de la Operación Paraquat, los ingleses demostraron que no venían al Atlántico Sur a pasear o "a mostrar la bandera". El 26 de Abril esta perspectiva, terminó de convencer a algunos mandos de la necesidad de hacer planes para la eventualidad de que la posibilidad antes mencionada (de que las hostilidades se abrieran y luego devinieran en conflicto a dos frentes) finalmente se concretara.
El 28 de Abril el Comandante del V Cuerpo de Ejército publicó y distribuyó su "Instrucción Preparatoria" para que se condujera el planeamiento preliminar de acciones en caso "de conflicto simultáneo con Gran Bretaña y Chile". El mismo contemplaba 4 posibles acciones contra Chile, en el área del Sur santacruceño, especificamente, tres de las cuales se planificaron como contra-ataques ante eventuales acciones chilenas, sobre las que se construía una acción de mayor envergadura hacia el interior del territorio chileno. La cuarta, sin embargo, imponía la realizacion de una ofensiva (que hoy denominaríamos "preventiva") con destino a la zona de Segunda Angostura, denominado OBJETIVO TERO.
Con un plazo de ejecución del orden de los 5 días, el objetivo era conquistar la pequeña localidad y retenerla; accesoriamente, se establecía la necesidad de acechar y hostigar a las fuerzas enemigas, a partir de una acción que -a caballo de la ruta hacia Punta Arenas- parecía tener por objeto romper la ligazón terrestre entre las poblaciones mas grandes de la Región de Magallanes (Punta Arenas y Puerto Natales), a lo que se asignaba el nombre de OBJETIVO ROJO.
Las dos primeras imágenes correspoden a la mencionada "Instrucción Preparatoria...". Las tres últimas (incluido el mapa que se ve en quinto lugar), corresponden al "Plan de Ofensiva EO Nro 4" o Plan de Ofensiva Estratégico Operacional, en su cuarta variante. Acá los documentos:
Saludos
Christian